martha giordano

"Disfruté mucho de la compañía tanguera de Martha en esta tarde, con tanto Sur rondando. Si ya la selección de canciones es muy buena, encontré en la interpretación algo que valoro enormemente en cualquier propuesta artística: el enfoque personal, distinto, y en su caso, además,la delicadeza sentida al abordar esas letras tan significativas, su respeto, la convicción para expresar esos temas de fondo que nos marcan desde la raíz. Quedé emocionado al escucharla, que es lo mejor que le puede ocurrir a un intérprete y a un oyente de tango. Flor de comunión. (Que es lo mejor que le puede ocurrir a todo arte, cuando es genuino). Enhorabuena, pues, extensiva a los sutiles dedos del pianista, que supo seguir esos aires y latidos. Héctor Rosales

Desde el título estamos ante el tango. El amor vivido no como un cuento de hadas sino como una ausencia. El amor como dolor supremo.
De repente, en una esquina de barrio, descubrimos lo que somos, entendemos nuestra mortalidad, nuestro tiempo escaso, lo vano de nuestras ambiciones. Pero seguimos adelante, porque el conocimiento de esta verdad nos salva de ella. Al final no somos más que un puente, la persona que entrega el testigo a otro que vendrá para tener las mismas angustias. Una ausencia y una congoja de la que sólo nos aliviará la mano tendida del amigo y el pequeño momento de goce que nos está permitido.
De ese material está hecho el tango. No podía ser de otra manera tratándose de una música de desterrados, de perseguidos, de aventureros y soñadores.
Federico Nogara